Potencia tu carrera: decálogo para tu crecimiento profesional
La búsqueda de superación personal es parte de los estímulos y motores de la sociedad. Se trata de una actitud que se evidencia en todas las áreas del quehacer humano.
Los grandes atletas se esmeran de manera especial en batir records, y entrenando cultivan óptimas condiciones físicas para lograrlo.
Los científicos más destacados trabajan y estudian de manera ininterrumpida para ir más allá de los descubrimientos existentes.
Emprendedores e innovadores exitosos se distinguen por el valor y la disciplina de retar las adversidades en función de mejorar su presente.
Y los artistas más apasionados, de todos los géneros, también se caracterizan por disfrutar el camino cotidiano de una sana autoexigencia o autosuperación.
Pero cuando las personas están estudiando o comenzando a trabajar, la motivación por la propia superación se da por obvia, como parte intrínseca del proceso de aprendizaje.
Sin embargo, la educación formal, en todos los niveles y en casi todas las áreas académicas, suelen subestimar o ignorar la atención al cliente como un tema vital de formación profesional.
Además, existe una tendencia social generalizada a pensar que la calidad de la atención al cliente únicamente se deriva del sentido común, del conocimiento y la práctica de buenos modales, y de los valores que se forman en el hogar.
En consecuencia, pocas personas ven claramente el peso que tiene la atención al cliente en el desarrollo de su carrera profesional.
En este sentido, quiero compartir contigo las reflexiones que encontrarás en el libro Potencia tu carrera, convencido de que la buena atención es el resultado del estudio y el refrescamiento constante de los valores que forman parte del arte de servir y ser útiles a los demás.
Creo oportuno insistir en principios que ayudan a comprender mejor los aspectos vitales de la buena atención, esenciales también para la vida personal y social.
Con frecuencia la atención al cliente se tergiversa, como si solo se tratara de un asunto laboral, de protocolos mecánicos, o de frases y acciones operativas prestablecidas, que nada más corresponden a ciertos empleados («los que atienden clientes»).
En tal sentido, considero urgente regresar a la esencia de la atención como una fuente de bienestar individual con alcance colectivo, y por eso el siguiente decálogo de valores es una guía complementaria para ampliar tus oportunidades de desarrollo profesional:
1. Atender no es igual a atender bien.
2. Atender bien es interesarse e influir positivamente.
3. Comprende la diferencia entre atención y servicio.
4. Hagas lo que hagas trabajas para la gente.
5. Es un asunto de competitividad.
6. Impacto de la atención en tu imagen personal.
7. Beneficios de vida y trabajo al atender bien.
8. Condiciones esenciales de la buena atención.
9. Hay que superar prejuicios sociales.
10. Mantente practicando y entrenando.
Puedes adquirir el libro en Amazon.com, impreso o en formato eBook.
En España, lo puedes adquirir en la librería virtual Bubok.com.
Su contenido es práctico y muy conciso. Lo escribí pensando en las personas con poco tiempo para leer, o que quieren ir al grano rápidamente.
Estaré muy pendiente de tus comentarios sobre las reflexiones que te genere esta lectura.
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